NUESTRA HISTORIA
Usme es un pueblo indígena que se ubica en la apartada y montañosa región del páramo de Sumapaz y cuenca alta del rio Tunjuelo. Hace parte del grupo de pueblos de indios que se asentaron en grandes zonas de la periferia de la sabana de Bogotá. La historia inicia más atrás de la llegada de los españoles. Este territorio fue habitado por los indígenas Herreras, durante los siglos II A.C. al XVI de nuestra época. Estos indígenas tenían una organización administrativa, política y militar en forma de confederación dirigida por un cacique.
En el año de 1630 aún no se había construido una iglesia para adoctrinar a los indígenas de Usme a pesar de que algunos años atrás se había dado la orden. Hacia el año 1650 se fundó la población de San Pedro de Usme como poblado de carácter rural. El 02 de marzo de 1718 fue erigida, según decreto del Señor arzobispo Francisco del Rincón, fraile mínimo; siendo la décima parroquia de la Arquidiócesis de Bogotá. El primer bautismo realizado fue el día… matrimonio…
La parroquia de Usme se consagra a su patrón fundador, San Pedro Apóstol, como la devoción más importante. La torre del templo parroquial fue reconstruida estando como sacerdote encargado el Señor Doctor Manuel Almonacid, quien bendijo y coloco la primera piedra el día 17 de octubre de 1887. Con dineros provenientes de limosnas y donaciones de algunos feligreses habitantes de Usme y sus veredas se ejecutaron las obras que concluyeron en enero de 1888.
El 02 de febrero de 1892 se reunió la población junto con su sacerdote el Señor Juan Nepomuceno Fandiño y el alcalde Wenceslao Carreño, para aprobar la venta de un terreno del solar de la casa Cural al Señor Belisario Orjuela, al igual que para planear la construcción de un camino en línea recta al cementerio, partiendo de la mitad de la acera occidental de la plaza donde los Señores Abel González y José Peñuela cedieron los terrenos para desarrollar la obra. El 25 de octubre del 1953 se dio lugar a la bendición y colocación de la primera piedra de la actual casa Cural, obra que termino en el siguiente año debido a la necesidad apremiante de dar vivienda segura a los sacerdotes ya que la anterior se encontraba en mal estado.
Hasta el año 1956 la parroquia se extendía hasta los límites de Pasca, Gutiérrez y Une de ahí en adelante se le anexo el alto Sumapaz, el cual pertenecía a la Parroquia de Cabrera, la cual se independiza de la Arquidiócesis de Bogotá para formar parte de la Diócesis de Girardot. En los años 1990 a 2000 se reconstruyo el cementerio en su totalidad. El cementerio es un lugar de gran valor patrimonial dado que está habitado por los antepasados. Es un recinto de memoria colectiva, y legado de las personas que vivieron por las tierras de Usme.
En el año de 1992 se separaron de la parroquia los barrios: Brazuelos, Usminia y Sucre, los cuales pasaron a formar parte de las parroquias de San Juan Neuman, Cristo Misionero y María Madre de la Divina Misericordia.
En el año 2005 se construyó el templo del barrio Oasis, con el aporte y liderazgo de las Hermanas Carmelitas de la Caridad (Vedrunas).
De la época se conservan elementos físicos como la puerta del siglo XVIII, el coro, los confesionarios y las imágenes del Sagrado Corazón, Virgen del Carmen y la Dolorosa.
Algunos libros y cuadros antiguos reposan en el archivo de la Arquidiócesis de Bogotá.